sábado, 14 de enero de 2017

Blog creado por el Prof. Tomas E. Visbal


Universidad de Los Andes
Facultad de Farmacia 
Mérida Venezuela

email: tomasvisbal34@gmail.com

lunes, 25 de marzo de 2013

FAMILIA PROCHILODONTIDAE. GENERO PROCHILODUS Prochilodus mariae “COPORO”

FAMILIA PROCHILODONTIDAE
Generalidades de la Familia Prochilodontidae 
Existen tres géneros en la familia Prochilodontiae: Prochilodus, Semaprochilodus e Ichthyoelephas. Si bien los tres géneros son fácilmente distinguibles externamente, Castro (2003) concluyó que la morfología externa de la mayoría de las especies de cada género es relativamente constante, y en muchas especies se dificulta distinguirlas unas de las otras. Esta familia puede ser distinguida fácilmente de otras familias, excepto en su etapa larval, por poseer labios carnosos (Figura 1), a los cuales se encuentran adheridos dos series de numerosos dientes, que pueden ser espatulados o falciformes.

FIGURA 1: Labios y dientes de los generos Prochilodontidae
Semaprochilodus laticeps "Sapuara"

Prochilodus mariae "Coporo"
                                              
 GENERO PROCHILODUS:
Comportamiento alimenticio del genero prochilodus 
Entre las especies de peces de interés económico-social destacan los del genero Prochilodus, ampliamente distribuidos en América Latina, estos peces tienen un habito de alimentación limnofago o iliofago (detritívoro), alimentándose en el ambiente natural de material orgánico que se encuentra en el fondo, vegetación sumergida que algunas veces tiene partículas minerales de bajo valor nutritivo, o materia orgánica constituida de vegetales en descomposición ricos en ligninas y celulosa, además de pequeñas cantidades de micro-invertebrados vivos (algas, hongos y bacterias). Estos peces nativos han presentado un buen desempeño para la piscicultura en virtud de su rápido crecimiento, en cultivo intensivo, de alta rusticidad para el manejo y alta fertilidad. Está entre las especies de mayor valor económico. A pesar de estas características hay carencias de información acerca de las exigencias nutricionales, para estos peces, lo que dificulta poder desarrollar alimentos balanceados adecuados, a fin de posibilitar su crianza intensiva La determinación de las exigencias nutricionales han sido fundamentales para la elaboración de dietas con menor impacto ambiental y de bajo costo principalmente aquellas utilizadas en sistemas de producción de peces con elevada tasa de crecimiento. Pocos estudios han sido realizados para determinar las exigencias dietéticas de proteína bruta para el Prochilodus. Estudios realizados por Hernández G., et al (2010), determinaron que dietas con concentraciones de 40% de proteínas y 2.500 Kcal/Kg, presentaron mejores resultados, en cuanto a crecimiento de larvas de coporo. Según estudios realizados por Delmonds, M., et al, (2005), sobre proteína cruda y energía digestible en dietas para Prochilodius affins (curimbatá) utilizando 256 peces, con pesos iniciales de 2,72 ± 0,11 g, empleando cuatro niveles de proteína bruta (PB), 18.0; 22.0; 26.0 y 30.0%. Combinados con dos niveles de energía (ED), 2700 y 3000 Kcal/Kg. Determinaron que las exigencias de PB y ED para alevines de curimbatá era de 26.05% y 2700 Kcal/Kg. que corresponde a una relación ED:PB de 10,36 Kcal de ED/ g de PB, que corresponden a mejores ganancia de peso para el pez. Atencio V., et al (2003), realizaron estudios sobre el manejo de la primera alimentación del bocachico (Prochilodus magdalenae), donde determinaron que las presas vivas, como nauplios de artemia o zooplancton silvestre entre un rango de 250 – 400 µm son presas adecuadas para el manejo de la primera alimentación al menos durante 3 días antes de ser sembrados en estanques de tierras, en este trabajo se determino que la abertura bucal del bocachico, en este estadio, era de 671 ± 12,8 µm. Galdioli E., et al (2002), llevaron a cabo un estudio donde realizaron sustituciones de harina de soya por harina de canola, en dietas para alevines de Prochilodus lineatus V., con pesos promedios de 1,88 ± 0,82 g, estas dietas fueron isoproteicas (26%) y mantuvieron un 10% de harina de pescado. Los investigadores determinaron que la sustitución de harina de soya por harina de canola, producían una disminución, lineal, de la ganancia de peso, así como de otros parámetros zootécnicos

ESPECIES DE PROCHILODUS PRESENTES EN VENEZUELA.
Las especies de prochilodus presentes en Venezuela son tres ( Fuente Castillo 2006)
Prochilodus rubrotaeniatus
Prochilodus mariae (Eigenmann 1922)







Prochilodus reticulatus
Prochilodus mariae Eigenmann 1922 (Bocachico Llanero)y Prochilodus rubrotaeniatus Valenciennes 1849 (Bocachico de Guayana), presentes al norte y al sur del río Orinoco, respectivamente, y Prochilodus reticulatus Valenciennes 1849 (Bocachico de Maracaibo (Bocachico de Maracaibo)  , oriundo de la cuenca del Lago de Maracaibo. Los peces prochilodóntidos son migratorios y muy abundantes, reconociéndose como peces de importancia capital en la pesquería comercial continental de la cuenca del río Apure (Taphorn 1992).
      Prochilodus mariae (Coporo): Conocido también como bocachico de los llanos, es una de las especies mas representativas de la ictiofauna del rio Orinoco, que posee amplia distribución y presencia en la pesquería durante todo el año, contando con gran aceptación en la región por formar parte de la dieta de las poblaciones ribereñas (Guzman et al., 1993 y Bustamante et al., 1997). Se distribuye en sistemas loticos y lenticos de toda la cuenca del rio Orinoco en Venezuela y Colombia desde la parte alta hasta su desembocadura, en todos los atributarios y en el plano inundable (Beltrán – Hostos et al., 2001). Presenta cuerpo fusiforme, suavemente comprimido lateralmente con coloración azul oscura en la parte dorsal y blanquesina centralmente, con bandas oscuras verticales a lo largo del cuerpo, aunque no son muy evidentes. Aletas con tonalidades rosadas en sus bordes y manchas oscuras en la aleta caudal dispuestas en líneas verticales onduladas. Boca protráctil con dientes labiales redondeados y labios gruesos a manera de ventosas que le permiten succionar el lodo. Su hábito alimenticio es iliofago detritívoro, pudiéndose encontrar en su estómago por lo menos 26 géneros distintos de18 fitoplancton y algunos rotíferos (Beltrán – Hostos et al., 2001). 
       Clasificación zootécnica: 

     Hábitos alimenticios:
Los coporos o bocachicos son peces detritívoros o iliófagos, es decir se alimentan en el fondo de ríos o sistemas de cultivo, de tamaño moderado propios de las principales cuencas de Sudamérica (Gèry, 1977). Se alimenta de bacterias del lodo, detritus, algas epibénticas y plancton, principalmente microalgas y algunos rotíferos. Durante su permanencia en el pie de monte, su alimento consiste, principalmente, en las algas que crecen sobre las rocas en los causes de aguas claras (Taphorn y Liyestrom, 1981).
    Hábitat y ciclo de vida del coporo:
 El coporo o bocachico, es una especie migratoria que vive en las tierras altas durante la sequía, donde maduran sus gónadas y luego descienden para reproducirse en el período de lluvias (Taphorn 1992, Barbarino et al. 1998). Uno de los aspectos más notable del ciclo de vida de P. mariae son las migraciones anuales que realiza; la migración ascendente o “ribazón” en la estación de sequía, y la descendente en la estación de lluvias (Lilyestrom, 1983), tal como se muestra en el Cuadro 1. Lilyestrom (1983) reportó las siguientes observaciones: los Coporos empiezan a salir de los esteros, donde han estado alimentándose y acumulando grandes reservas de grasa durante el período de lluvias, alrededor de agosto, al pasar el pico de la estación lluviosa. A los ríos del pie de monte, llega el grueso de las migraciones en los meses de diciembre o enero. Los prochilodus son famosos por su habilidad de sobrepasar obstáculos que se encuentran a lo largo de su ruta de migración, esto debido a la fortaleza de su nado y a su capacidad de saltar fuera del agua hasta por varios metros (Castro, 2003).
CUADRO 1: Resumen del ciclo anual y movimientos de Coporo en el oeste de Venezuela Fuente: Duque et al. (1998).
 Propiedades nutricionales por cada 100 g. de parte comestible del coporo.
El coporo es un pez de carne muy apreciable, con un alto contenido de proteínas. Ver tabla 1.
TABLA 1: Composición proximal de la parte comestible del coporo
 Tabla tomada de la “Tabla de Composición de Alimentos para uso práctico. 2001


    Comportamiento reproductivo del coporo
Su comportamiento reproductivo se encuentra ligado estrechamente con su carácter migratorio, por lo cual se reproduce en determinado periodo del año, durante la permanencia del cardumen en el pie de monte, ocurre el mayor desarrollo de las gónadas de los coporos. Al crecer los ríos con el comienzo de las lluvias, se efectúa la migración descendente, y posterior desove en el cauce. Los huevos semipelágicos de Prochilodus flotan río abajo hasta los remansos, antes de seguir río abajo a los sitios principales de alimentación, que serían en este caso los esteros (Lilyestrom, 1983). Castro (2003) reporta que esta migración río abajo se produce en principio por pequeñas congregaciones de peces que inician movimientos descoordinados; estos se congregan para realizar la cópula en ríos y diversos sitios de la sabana inundable durante los picos de lluviosidad (mayo-junio). Antes de esto, los coporos machos inician un cortejo que consiste en la emisión de sonidos percutivos de muy baja intensidad que se presume atrae a las hembras maduras sexualmente. Los huevos fertilizados, embriones y larvas son llevados por la corriente río abajo y eventualmente terminan depositados en lagunas de planicies aluviales donde los juveniles de Coporo se alimentan de algas e invertebrados (Duque et al., 1998).

       IMPORTANCIA PARA EL PAIS (VENEZUELA) DEL COPORO
 El Gobierno venezolano ha dado gran importancia al cultivo de peces, para lo cual ha invertido gran cantidad de dinero en proyectos, entre los cuales se encuentra un proyecto administrado por la Fundación para el desarrollo de la Ciencia y Tecnología Agrícola “FUNDAGRI” (Ejecutado 01/07/2004 - 30/06/2005) el cual consistió en desarrollar en la Estación Piscícola Papelón (Edo. Portuguesa) un Centro Integral de Producción, reproducción, capacitación y repoblación de aguas cálidas, con proyección nacional. El monto de la inversión fue de 231.112.353,00 Bs. Los rublos de producción fueron Cachama y Coporo. Entre sus objetivos estaban: - Producción de alevines y juveniles de coporo (Prochilodus mariae) y de cachama (Colossoma macropomum) de importancia comercial para la Unidad de Negocios. - Producción de coporo (Prochilodus mariae) y cachama (Colossoma macropomum) en estanques de grandes dimensiones a través de la técnica de policultivos. - Desarrollo de estrategias de producción y comercialización de coporo (Prochilodus mariae), cachama (Colossoma macropomum), sus híbridos y bagres de cuero.
   Producciones esperadas, de cachama y coporo, para los años 2006 - 2009 


 En la actualidad, la Estación Piscícola Papelón, adscrita al Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas (INIA), cuenta con 24 hectáreas de espejos de agua y está ubicada en el municipio Papelón, a 38 kilómetros de Guanare, capital de Portuguesa. El objetivo primordial de la Estación Piscícola de Papelón es la producción de semilla (alevines) y su mejoramiento genético, principalmente Cachama Desde el año 2005, un grupo de investigadores de la Estación Piscícola de Guanapito, han evaluado y comprobado la eficiencia en el uso del extracto de hipófisis de Coporo, como sustituto de la hipófisis de Carpa, para la inducción a la reproducción de diversas especies. Hay varias especies de consumo como la Cachama y el Coporo, entre otros, que para reproducirse en cautiverio deben ser inducidas con hormonas, esto principalmente porque en los estanques de reproducción las condiciones son totalmente distintas a las existentes en los ríos. Estos investigadores han podido constatar la eficiencia del material obtenido, ya que se logro inducir a la reproducción de Coporos en estanques artificiales. Insopesca, desde 2006 ha repoblado 241 cuerpos de agua con la siembra de 2 millones 361 mil 654 juveniles, para una producción de 1.212 toneladas de las especies cachamas, coporo, bocachico y trucha. En el año 2008, como parte del fortalecimiento de los recursos pesqueros y productivos que se encuentran en los cuerpos de agua, el Instituto Socialista de la Pesca y Acuicultura (Insopesca), organismo adscrito al Ministerio del Poder Popular para la Agricultura y Tierras (MPPAT), realizó la siembra de alevines de Coporo y Cachama en el estado Guárico. Dicha siembra fue realizada en el embalse Guárico, ubicado en el municipio Miranda, Parroquia Calabozo, con 5 mil alevines de Coporo y 5 mil alevines de Cachama, donados por el Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas (INIA) – Guanapito. En el año 2009, con el objetivo de continuar con el avance del plan nacional de repoblamiento de cuerpos de agua de uso público, el Instituto Socialista de la Pesca y Acuicultura (Insopesca), realizó la siembra de 6 mil juveniles de cachama blanca y 4 mil de coporo, en el embalse Las Majaguas del estado Portuguesa. Para el año 2009, uno de los objetivos del Instituto Nacional de Investigaciones Agricola (INIA) del Estado Delta Amacuro, estaba dirigido a producir y aumentar la capacidad instalada de alevines de buena calidad de especies de peces de agua dulce como cachama negra, morocoto, el híbrido cachamoto y coporo, para contribuir a abastecer la demanda generada por el Plan Nacional de Desarrollo Agro productivo.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS
Atencio, G. V., Kerguelén, E., Wadnipar, L. y Narváez, A. (2003). Manejo de la primera alimentación del Bocachico (Prochilodus magdalenae). MVZ- Cordova, 8(1), 254 -260.
Barbarino, A., D. Taphorn y K. O. Winemiller. (1998). Ecology of the coporo, Prochilodus mariae (Characiformes, Prochilodontidae), and status of annual migrations in western Venezuela. Environmental Biology of Fishes 53: 33-46.
Beltran Hostos, D., Ajiaco-Martinez, R., Ramirez- Gil, H. (2001) Prochilodus mariae. 96–99 p. La pesca en la baja Orinoquia: Una visión integral. Instituto Nacional de Pesca y Acuicultura, INPA. Bogotá, D.C., Colombia
Bustamante, L., Quintero, L., Martinez, N. (1997). Desarrollo larval del coporo, Prochilodus mariae, en estanques abonados y con suplemento alimenticio. Dahlia, 2: 65-69.
Castro, R.M.C. y R.P. Vari. (2003). Prochilodontidae (Fannel mouth characiforms). p. 65-70. En: R.E. Reis, S.O. Kullander y C.J. Ferraris, Jr. (Eds.). Checklist of the Freshwater Fishes of South and Central America. EIPUCRS. Porto Alegre, Brasil.
Delmondes, M., Teixeira, E., Serafini, M., Barbosa, F. y Da Silva K (2005). Proteína Bruta e Energia Digestível em Dietas para Alevinos de Curimbatá (Prochilodus affins). R. Bras. Zootec., 34 (6), 1795-1806.
Duque, A.B., D.C. Taphorn y K.O. Winemiller. (1998). Ecology of the Coporo, Prochilodus mariae (Characiformes, Prochilodontidae), and the status of annual migrations in western Venezuela. Environ. Biol- Fish.53 (1):33-46.
Galdioli, E., Hayashi, C., Martins, C., Barriviera, V. y Esper, A. (2002). Sustituiçâo da Proteína do Farelo de Soja pela Protéina do Farelo de Canola em Raçôes para Alevinos de Curimbatá (Prochilodus lineatus V.). R. Bras. Zootec. 31 (2), 552 – 559.
Gèry, J. (1977). Characoids of the world. TFH Publications. Neptune City, New Jersey. 672 pp.
Guzman, R., Reyes, A., Barreto, M. (1993). Contenido de cobre en el coporo (Prochilodus mariae) y en el caribe (Serrasalmus rhombeus) de laguna grande, Estado Monagas. Nota técnica. Zootecnia tropical, 11(1): 59-69
Hernandez, G., Gonzalez, J., Alfonso, E., Salmeron, Y. y Pizzani, P. (2010). Efectos de la relación energía/proteína sobre el desempeño productivo en larvas de coporo (Prochilodus mariae). Zootecnia trop., 28(2): 173-182
Lilyestrom. C.G. (1983). Aspectos de la biología del Coporo (Prochilodus mariae). Rev. Ciencia Tecnol. UNELLEZ. (Barinas) 1:5-11.
Taphorn, D. (1992). The Characiform fishes of the Apure River drainage, Venezuela. Biollania Edición Especial 4: 1-537.
Taphorn, Donald y C. Lilyestrom. (1981). Los peces de importancia económica del área Guanare – Masparro, Informe preliminar. CIDIAT, Mérida. 23 pp

PERSPECTIVAS DE LA ACUICULTURA Y LA PESCA PROBLEMAS DE LA SOBREPESCA EN EL MUNDO

PERSPECTIVAS DE LA ACUICULTURA Y LA PESCA PROBLEMAS DE LA SOBREPESCA EN EL MUNDO Según la Food and Agriculture Organization (FAO), la pesca, basada en la extracción de los recursos naturales, ha sufrido fuertes cambios en la última década, no solo en lo referido a su dimensionamiento original, sino en cuanto a la calidad de su composición específica, ya que los recursos hídricos han disminuido su capacidad de sustentabilidad natural, debido a la contaminación u otros factores. La acuicultura, que se ocupa del cultivo controlado de animales y plantas acuáticas en sus diferentes etapas que contemplan: cosecha, proceso, comercialización y consumo final, tiene una larga historia de más de 2500 años, habiendo comenzado en China, cerca del año 500 A. C., en forma empírica y por tradición agrícola, como actividad practica, abarca actualmente el cultivo de todas las especies animales y vegetales que estén relacionados con el agua, directa o indirectamente; por reproducción a) invertebrados y vertebrados entre los animales, b) algas y plantas superiores entre los vegetales. La piscicultura, encargada del cultivo de peces, fue y sigue siendo, una de las ramas más importantes y más antiguas de la acuicultura, sin embargo, fue a partir de la década del 60 y 70 que se le prestó mayor atención a su desarrollo científico. Según el Departamento de Pesca y Acuicultura de la FAO, en su reporte estado mundial de la pesca y la acuicultura 2010, indicaron que la pesca de captura y la acuicultura suministraron al mundo unos 142 millones de toneladas de pescado en 2008. De ellos, 115 millones de toneladas se destinaron al consumo y proporcionaron un suministro per cápita aparente aproximado de 17 kg (equivalente en peso vivo), lo cual constituye un máximo histórico. La acuicultura generó el 46 % del suministro total de pescado comestible, manteniendo un continuo crecimiento.
PROBLEMAS DE LA SOBREPESCA EN EL MUNDO:
 La sobrepesca es la pesca excesiva, realizada por el humano, ya sea sobre peces o mariscos. La sobrepesca tiene además efectos devastadores sobre los ecosistemas, que van más allá del impacto directo que se ejerce en las especies capturadas, pues una variación notable y repentina del número de ejemplares de una especie puede ejercer una presión intolerable en su medio ecológico. Por ejemplo, si se eliminan la mayoría de las truchas de un río, las carpas se colocarán en una situación predominante que impedirá indefinidamente el restablecimiento de la población de truchas. En la última década se hizo evidente que los recursos pesqueros que se creían prácticamente inagotables, han comenzado a declinar de una manera inimaginable. Durante dos décadas, 1960 y 1980, la producción de las flotas de alta mar y aguas interiores aumentó significativamente, alrededor de un 6% anual en promedio. En la década de 1980, la tasa de crecimiento disminuyó y en la década de 1990, la cosecha se niveló, la curva de producción mundial de pescado se volvió horizontal al alcanzar los 100 millones de toneladas anuales, y no se ha modificado en los años posteriores. Sin embargo, el problema continúa siendo evidente, mientras el producto de acuicultura crece, los rendimientos de las pesquerías que capturan especies no cultivadas en los océanos y aguas interiores es desparejo. Abundantes pesquerías de especies de mares profundos como el bacalao de Nueva Inglaterra y el de Canadá oriental empezaron a desaparecer, las del atún gigante del océano Atlántico se redujeron a niveles que ponían en peligro su capacidad de reproducción y varias especies del salmón del océano Pacífico y Atlántico fueron colocadas en la lista de especies en peligro. Detener la pesca excesiva y permitir que las existencias se recuperen aumentaría la productividad y maximizaría los ingresos de la industria a largo plazo. La pesca sin control se ha extendido tanto en el mundo desarrollado como en el mundo en desarrollo. Este tipo de pesca tiene efectos perjudiciales obvios en las especies que son objeto de capturas y al mismo tiempo, se afecta el ecosistema en el cual viven esas especies causando perjuicios a los pescadores y sus comunidades. La Organización de las Naciones Unidas, a través de la FAO, considera que las especies marinas de las que se dispone información, del 47 al 50% están explotadas a plenitud, del 15 al 18% se explotan excesivamente y del 9 al 10% se han agotado o se recuperan del agotamiento.
SITUACIÓN MUNDIAL DE LA SOBREPESCA:
La sobrepesca no es un fenómeno nuevo, pero fue durante el siglo XX cuando alcanzó escala global. Las modalidades tradicionales de pesca, como las pesquerías artesanales de atún en el Mediterráneo, han desaparecido o lo harán casi con seguridad en los próximos años, por una doble causa: la imposibilidad de competir con los métodos industriales modernos de alta tecnología, mucho más rentables, y sobre todo la ausencia de ejemplares suficientes que permitan mantener un modo de vida que en ocasiones se habían sostenido durante siglos o milenios. Según la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO), estima que el 77% de las especies con valor comercial están afectadas en mayor o menor grado de sobrepesca (8% ligeramente, 17% en sobreexplotación y 52% en sobreexplotación máxima). (FAO, 2003) Las capturas de pesca alcanzaron un máximo de 100 millones de toneladas en el año 2000, pero la producción disminuyó por primera vez desde 1.990, a pesar de que la capacidad pesquera no ha dejado de aumentar. Los individuos capturados son cada vez de menor calibre, y más jóvenes. La proporción de capturas en las zonas bajas de la cadena trófica ha aumentado. Los buques factoría faenan cada vez en más zonas (África occidental, Océano Índico, Océano Pacífico, etc.), pescando cada vez a mayor profundidad, capturando numerosas especies y colapsando los ecosistemas, sobre todo por el uso de redes de arrastre. Como consecuencia de la pugna entre flotas que compiten por los mismos recursos, y dado que suelen ganar estas batallas los que usan métodos más agresivos (y por tanto más dañinos para el ambiente), empezó a imponerse la pesca de arrastre de fondo, método de pesca hoy muy extendido. Hace varias décadas se popularizó la pesca de atunes y pez espada con grandes redes de deriva, de hasta 20 km de longitud, hoy en día prohibidas por la ONU y por la Unión Europea. Pero estos problemas no han terminado; hay flotas europeas que pescan sardinas y boquerones con redes de arrastre pelágico. La tecnificación de la pesca ha dado lugar a un aumento rápido de las capturas secundarias o colaterales. El 25% de lo pescado, es decir, 27 millones de toneladas, es arrojado de nuevo al agua, (por tratarse de especies distintas a las buscadas), si bien ya se trata de animales muertos, delfines, tortugas y pájaros marinos (100.000 albatros al año), son así capturados y muertos durante la pesca. Además, las redes abandonadas causan también innumerables muertes de animales.
SITUACIÓN EN AMÉRICA:
En las costas de Terranova, la disminución general de la pesca ha producido una menor talla media de las ballenas propias de estas aguas. Se han producido migraciones de focas desde Groenlandia hacia las costas de Canadá. La desaparición de morenas y otros predadores a lo largo de Estados Unidos ha conllevado un aumento de los herbívoros marinos, con una fuerte disminución de los bosques de algas. Se ha observado una modificación de la estructura de las comunidades y de la diversidad genética por la selección de especies, y del tamaño medio. Esta presión sobre los hábitats los convierte en más vulnerables ante invasiones biológicas, la contaminación y en general a cualquier cambio. A lo largo de toda América se ha producido un incremento de las capturas de especies de menor valor, especialmente las pelágicas, que se usan para fabricar harina de pescado con destino a la alimentación animal. En cambio las capturas de especies de más valor (fletán, merluza, etc.) se han reducido drásticamente debido a su escasez, por lo que aunque las capturas tienden a aumentar en peso, el valor económico total tiende a disminuir; la única excepción es el atún, cuyas capturas siguen aumentando. Según los estudios disponibles, las especies pelágicas están siendo sobreexplotadas, y las de alto valor comercial se mantienen con capturas de individuos cada vez más jóvenes. Debido al agotamiento de especies se están ensayando capturas nuevas, como el merlán, la sardina japonesa y especies pelágicas en el Pacífico sudeste. En Latinoamerica los países pesqueros más importantes son Chile, México y Perú, con importantísimas reservas pesqueras en sus litorales. Chile y Perú concentran sus capturas en muy pocas especies, generalmente pelágicas (caballa, sardina, anchoveta, jurel), empleadas a menudo en harinas de pescado; se trata de flotas industriales, que dejan poco margen para las flotas artesanales. Es importante señalar que Perú atravesó una crisis sin precedentes en los años 70 del siglo XX, cuando se hundió la pesca de la anchoveta debido a la sobreexplotación, crisis que trajo como consecuencia la desaparición de gran parte de la flota de este país. En toda América operan también, además de las flotas nacionales, las de Japón, España y Corea, generalmente mediante buques factoría que producen filetes congelados de pescado con destino a sus países de origen. Como aportaciones positivas pueden señalarse la determinación de cuotas de captura, y el aumento del tamaño en las mallas pesqueras, encaminado a evitar la captura de animales prematuros.

¿Quienes somos?


Somos un grupo de profesionales en el área de nutrición animal, principalmente en el área piscícola.

¿Nuestro objetivo es?

Solucionar el suministro no adecuado de alimentos para peces, en sus diferentes estadios. Es decir, los alevines requieren de un mayor porcentaje de proteínas que los juveniles. Los juveniles requieren de más proteínas que los adultos. También no es lo correcto alimentar cachamas o coporos con dietas para truchas, ya que las truchas son carnívoras mientras que la cachama es frugívora y el coporo detritívoro, y sus requerimientos proteicos son diferentes.
En conversaciones que hemos tenido con productores piscícolas muchos desconocen el suministro adecuado del alimento, es decir, el tamaño del granulo. Es lógico que si el granulo del alimento es grande no es posible que el pez lo ingiera, lo que generara estrés en los peces, si es muy pequeño se perderá en la superficie de la laguna o ira al fondo donde se descompondrá y afectara la calidad del agua. Esas y muchas más interrogantes estamos seguros podremos resolverlas, si ustedes nos las plantean.